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Tus dedos, cual soldados
avanzan por mi territorio…
Buscando de mi oasis los tesoros…
Mientras tus hordas de besos.
Conquistan lentamente mi frontera…
sometiendo mi ropa en tu locura,
amarrando mis manos con tu seda…
esclavizándome ¡completa! ¡Entera!
La tortura fue iniciada en mi oído…
Relatando lo que me harías paso a paso.
Primero deleitándote en mi cuello.
Para luego alimentarte con mi pecho…
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Mis brazos en inútil resistencia,
trataban de iniciar la retirada…
Más tus dientes tiraban mi muralla,
mientras tu lengua me convertía en su esclava.
¿En qué momento capturaste mis zapatos?
Nunca sabré cuando cedió el vestido…
Sólo sé que en tus brazos me estremezco,
Y que mis muslos ¡ante ti, ya están vencidos!
Porque en ellos se escurre la miel que se derrama
Consecuencia brutal de tu caricia…
Arma mortal para ganar la guerra…
Que somete, que tortura y martiriza…
Y así… desnuda… Y sin orgullo…
Mi cuerpo derrotado entre tus manos,
Te abre el portón para ser penetrado…
Dueño y Señor: ¡El reino tú has ganado! te amo luis