Ciudades: Las noches cerradas a cal y canto, cuando las estrellas descansan a los pies de las gárgolas, en suelos empedrados, la gente y el humo, las horas y la luna, como únicas aliadas en estas luchas vaporosas, de hoy y mañana. La muerte sólo baila con la dama de negro, hoy no amanece, porque Satán toma forma de inocencia, hoy alguien ha pintado esta noche, aunque no tenga tulipanes, ni estrellas. Descorcharé más humo para seguir caminando, serviré más café para que la lengua no vuelva al establo, hoy el único testigo de esta noche eterna, de suelos empedrados y estatuas moribundas, es la muerte, que se cierne de lado a lado, y en sus brazos, la dama de negro, la luna no responde a las pesadillas del autor pues el retrato más fiel de esta noche sin estrellas, ni tulipanes, es el que mis cansados ojos, olvidarán mañana y ellos los guardianes de la ciudad seguirán ahí.