Muchas cosas nos pasaron.
Tantas historias.
Pero hoy de nada valen los recuerdos.
Golpeaste esa puerta por ultima vez.
Giraste tu cara inundada de lagrimas.
Pero hoy de nada valen esos llantos.
Quede en silencio sin entender tu adios.
Quede en silencio sin comprender porque te deje ir.
Que paso en el camino?
Que nos paso?
Te amaba.
Te amaba sin condiciones.
Creo que tu tambien lo hacias.
Me amabas sin condiciones.
Entones que paso?
Porque la muerte de nuestro amor?
Porque fue tan repentina tu partida?
Acaso hay otro?
Acaso tuviste miedo?
Acaso sentiste que no podias seguir?
Observe por mi ventana, el momento en que subias a ese auto.
Me miraste.
Nos miramos.
Y todo se redujo a eso.
Ese segundo fue letal.
Ese segundo fue el adios.
Ese segundo fue el final.
Un final antes impensado.
Un final tan repentino como tragico.
Tan extraño como doloroso.
Y ese fue el final.
Nuestro final.
El final del amor.
En que lugar tan alejado se encuentra mi paraíso?
Porque constelaciones tendré que pasar para encontrar ese lugar?
Que mundos tendré que visitar para que mi alma busque descanso?
En que cometas viajare buscando ese hermoso lugar?
Todas estar preguntas surgen luego de ver la lluvia golpear mi ventana.
Esas tristes gotas que empañan las ventanas de mi corazón.
Hoy las estrellas están en otro lado.
Hoy las nubes cubren mi alma
Anunciando un atormentador por venir.
La ciudad se tiñe de negro al oír los lamentos del cielo.
Pero nadie quiere oírlos, porque nadie puede oírlos.
Nadie posee oídos para escuchar tan estruendosos alaridos.
Yo sigo buscando el paraíso.
Sin embargo no puede hallarlo. No puedo verlo.
Levanto la vista y te veo ahí. Durmiendo en un lado de la cama.
Tu rostro angelical ilumina la habitación.
También ilumina mi alma.
Entonces comprendo que buscar el paraíso es en vano.
Comprendo que no se encuentra más allá de las estrellas.
Comprendo que no se encuentra en otro mundo.
Buscar el paraíso es en vano.
Sobre todo cuando ya me encuentro en el.
Sobre todo cuando disfruto los aromas de sus hermosos jardines.
Cuando camino por sus hermosos valles.
Cuando navego por sus cristalinos mares.
Cuando junto con mi ángel recorremos el mundo.
Nuestro mundo.
Ese inmenso paraíso llamado amor.
Este es mi tiempo y esta es mi lágrima , caminante nocturna, devoradora de almas,
tu abrazo me eleva tan alto... al infinito, que pareciera que tuvieras alas,
vagando lejos perdidos en el espacio sepulcral, solos tu y yo,
solos, lejos de toda mirada acusante, sin visiones de mortalidad, donde el tiempo ya no corre
donde ya nada importa, solamente tu y yo y la sublime oscuridad.
Y cuando aquel rayo de luna ilumine tu rostro y tus tibias lagrimas caigan
como lluvia de plata en mi sombrío corazon, tu alma se fundira con mi alma,
y un ultimo deseo se me escapara, quiero darte un beso y quedarme asi,
con los ojos cerrados, no quiero moverme, no quiero respirar, solo escuchar
lo que tus labios le diran a los míos en el interminable beso de mármol.
Donde hay luz hay tinieblas, donde hay tiempo hay eternidad
Y yo te amare eternamente, y eternamente no es una eternidad
es simplemente para siempre.
Mi alma nace y vive al borde de tus ojos negros
donde fosforece la luna y desaparece la niebla,
en mis calladas noches donde emigraban los cuervos,
ahora solo la traslucida centella de la sombra baila.
Anoche cuando pensaba en ti, misteriosa y hermosa,
senti latir la noche entera en el grisaceo firmamento,
donde la lluvia se apoderaba de mi, silenciosa.....
Mi espiritu moriria sin el recuerdo de tu beso.
La locura es tan solo el puente entre el instinto y la razón.
Se dice que herido es aquel que conoce el dolor,
más ahora solo se realmente desde mi negro corazón,
que loco y herido realmente es aquel que conoce el amor.
Te he dicho volcando mis sentimientos todo lo que siento,
como si desplegaras tus suaves alas de plumas negras sobre mi
abrazo que me interna en tu alma y diluye cualquier tormento
te seguire amando en sueños, con los parpados abiertos y aún cuando no este cerca de ti.
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