A ti que me lees...
confidente de mis angustias..
de mis dudas, de mis alegrías..
A ti que compartes mis logros y sentimientos...
Da igual quien seas..
te he dejado abierto
este rinconcito de mi corazón, y tras la pantalla
accedes a mis mas íntimas sensaciones.


Gracias por acompañarme..

jueves, 12 de enero de 2017

Como la aurora infiel de los recuerdos,
quiero verte
y te llora la ausencia de mis manos,
cuando el presente te vuelve pasado
y el tiempo nos parte la voz,
en mil abrazos.

Inmensa la espera que te escribe
y la herida que te añora.
Intensa la parte de mi boca
que recuerda las horas de abrazarte.
El ansia de decirte
lo mucho que imagino
tu vientre de posada
y mi piel de peregrino,
tratando de arrancarte de este olvido
que nos ata y nos derriba.

Es posible,
que haya vida
más allá de la herida de perderte;
que tenerte sea razón
y desvarío.

Es el rio del deseo
que me arrastra a tu corriente
y mantiene maniatada la cordura.

Es la duda de anidar en tu silencio,
la que mata y resucita;
la que invita y desvanece;
la que florece y marchita
y me evita
y me llama.

Queda la alcoba que vela
y permanece;
queda que quieras y regreses;
que mueras en los linos que yo muero
cuando invento la caricia
y justifico la ausencia;
cuando reclamo paciencia al impulso
y al latido;
cuando despierto al intento
de crearte vivo,
ahora que la tarde arde
y tu boca me derriba.

No hay comentarios:

Publicar un comentario